viernes, 23 de octubre de 2009

Bienvenidos a Holanda...


"A menudo me piden que describa la experiencia de criar a un niño con una discapacidad, que intente ayudar a la gente que no han compartido esa experiencia única a imaginar cómo se sentirían. Es así…
Cuando vas a tener un bebé es como planear unas vacaciones fabulosas en Italia. Compras un montón de guías y haces tus maravillosos planes. El Coliseo. El David de Miguel Ángel. Las góndolas de Venecia. Puede que aprendas algunas frases útiles en italiano. Es todo muy emocionante.
Después de meses de ansiosa anticipación, finalmente llega el día. Preparas tus maletas y allá vas. Varias horas más tarde el avión aterriza. La azafata viene y dice: “Bienvenido a Holanda”.
- ¿Holanda? – dices -. ¿Cómo que Holanda? Yo me embarqué para Italia. Se supone que estoy en Italia. Toda mi vida he soñado con ir a Italia. Pero ha habido un cambio en la ruta de vuelo. Han aterrizado en Holanda y aquí se debe quedar.
Lo importante es que no te han llevado a ningún lugar horrible, asqueroso y sucio, lleno de pestilencia, hambruna y enfermedad. Simplemente es un sitio diferente.
Así que tienes que salir y comprarte nuevas guías. Y tienes que aprender una lengua completamente nueva. Y conocerás a un grupo entero de gente que nunca habrías conocido.
Simplemente es un sitio diferente. Camina a un ritmo más lento que Italia, es aparentemente menos impresionante que Italia. Pero cuando, después de haber estado un rato allí, contienes el aliento y miras alrededor, empiezas a notar que en Holanda hay molinos de viento. Holanda tiene tulipanes. Holanda tiene incluso Rembrandts.
Pero todo el mundo que conoces está muy ocupado yendo y viniendo de Italia y todos presumen muy alto de qué maravillosamente se lo han pasado en italia. Y, durante el resto de tu vida, dirás “Sí, ahí era donde se suponía que yo iba. Eso es lo que había planeado.”
Y ese dolor nunca, nunca, nunca, se irá, porque la pérdida de ese sueño es una pérdida muy importante.Pero si te pasas la vida quejándote del hecho de que nunca llegaste a Italia, puede que nunca tengas libertad para disfrutar de las cosas, muy especiales, maravillosas, de Holanda."
(Por Emily Pearl Kingsley)


Puse este texto porque siempre nos dan miedo las cosas diferentes, no somos capaces de pensar las cosas bellas e interesantes que hay en lo diferente. Espero que los que me leais sepais apreciar y aprender a no tener miedo a lo diferente, a ver más alla de lo q nuestros ojos ven, a aprender a querer a los que nos rodean sin tener prejuicios. Porque como dice el texto hay q disfrutar de las cosas que nos vienen y aprender a amarlas...

domingo, 18 de octubre de 2009

Me siento tonta...

Me siento desilusionada, desilusionada,
porque tener sueños no me ha servido de nada,
porque sé que jamás se cumplirán
y porque no quiero tener mas sueños.

Me desilusionan tambien las cosas que
se toman a la ligera, como si los sentimientos no importaran.
Sólo preocuparse de vivir el momento, todo lo demás: ¿Qué más da?
Siempre el egoismo, siempre el yo por encima de los demás.
Me siento cansada. Estoy cansada
físicamente y.... tengo cansada el alma,
de amar y dar sabiendo que nada importa
lo que yo sienta, ni lo que yo de.
Sabiendo que lo que doy no vale de nada,
que regalo lo que no quieres, mi cariño.
Me siento tonta, por ser como soy,
por pretender que me quieras, como yo te quiero.
Me siento tonta por creer en las personas,
por creer el amor verdadero.
Me siento tonta por haber luchado
contra gente que tiene demasiada fuerza,
por no darme cuenta que desde el principio
era yo la gran perdedora.
Me siento tonta... pero no lo soy.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Te echo de menos




Que dificil es de echar de menos a personas y a veces
no están tan lejos, pero a kilometros de distacia,
en todos los sentidos.
Pero te seguiré echando de menos

jueves, 1 de octubre de 2009

Muñeca...

Soy como una muñeca en tus manos,
a veces parece que juegas conmigo
y otras me mimas como ese pequeño
tesoro entre tus manos.
Me da miedo romper nuestros lazos,
que corras y busques
una muñeca en otro lado.
Ay de mi, muñeca de los tristes abrazos,
que a veces llora y otras sueña,
para que nunca te vayas de mi lado.